Featured Post

“No quiero que me maten por mi forma de pensar”: Bryan y Jacqueline, expresos políticos, denuncian persecución de Estado

Por:  / 29 agosto, 2015
BryanJacqueline
¡Dale Like, comparte y deja tus comentarios!
(29 de agosto, 2015. Revolución TRESPUNTOCERO).- Jacqueline Santana y Bryan Reyes, activistas sociales y expresos políticos encarcelados tras fabricarles el delito de robo en perjuicio de una agente de la Policía Federal, han denunciado desde hace un par de semanas la puesta en marcha de una campaña de hostigamiento, persecución y acoso en su contra, misma que a la fecha, señalan, se ha expandido y ha alcanzado a familiares y amigos que les han apoyado.
Desde el pasado 11 de agosto ambos activistas comenzaron a detectar la presencia de individuos extraños con actitud sospechosa en diversos lugares en donde desempeñan sus actividades cotidianas. Detallan que estos grupos de hombres desconocidos mantienen una postura claramente vigilante sobre la pareja, en donde ya no intentan pasar desapercibidos, sino que hacen obvia la vigilancia que mantienen.
Ante esta serie de hechos, tanto Jacqueline como Bryan pidieron a la sociedad, a las organizaciones, así como a los demás activistas en lucha estar al pendiente de esta situación, pues, dijeron, luego del multihomicidio en la colonia Narvarte,  es claro que cualquiera está expuesto a sufrir una agresión mayúscula.
Esta tarde al ofrecer una rueda de prensa para denunciar el hostigamiento del que han sido víctimas, Jacqueline Santana señaló que esta ola de ataques se debe a la manera de pensar que ambos luchadores han demostrado, incluso estando en prisión. Además habló sobre el acoso que también han sufrido familiares, en especial su mamá (María de la Luz López),  la de Bryan Reyes (María del Carmen Rodríguez), así como Wendy Reyes, hermana de Bryan.
“La persecución no sólo es en el DF. Por ejemplo la mamá de Bryan está en Baja California  y hasta allá ha llegado la persecución. Mi madre está en el Estado de México y también ha sido acosada. La persecución es federal. Mancera hace el trabajo sucio con Peña Nieto, pero no es algo que sólo está focalizado aquí.
“No es que el Estado nos esté persiguiendo porque estemos organizando a grandes masas, u organizado a mucha gente para que se levante contra el Estado,  simplemente es nuestra forma de pensar (…) Nuestras ideas nos convierten en enemigos inmediatos del Estado. ¿Qué es lo que hemos encontrado? El Estado traza su embestida contra las pequeñas organizaciones que existen y que se declaran abiertamente contra este sistema, contra este gobierno que ha encabezado, desde que llegó, una violencia descomunal”, manifestó.
Asimismo habló sobre el hecho que los sujetos que mantienen el acoso y la vigilancia actúan de una manera “descarada”. Además expresó su preocupación ante la incredulidad de la sociedad sobre esta campaña de persecución que padecen, pues dijo, algunos piensan que es “paranoia nuestra”.
“Este seguimiento que hemos tenido es muy evidente, ellos ya no se están cuidando que no los veamos, que nos toman fotos, o que nos siguen, o que traen armas. Es una situación donde ya está bastante consentido, algo que el gobierno está permitiendo, son evidentes los ataques, y lo que me preocupa es esta parte donde la sociedad parece no creer que está sucediendo, piensan que es paranoia, y entonces caemos en esta situación en donde, por ejemplo, el caso de Nadia y Rubén que estuvieron denunciando pero muchos lo calificaban como paranoia y hasta que los mataron fue que vieron la realidad, ver que el Estado si está reaccionando de esa manera.
Y no es que quiera preservar mi vida como a toda costa pero de alguna manera no es que quisiera morir por pensar diferente. Me parece que es importante darle difusión, porque además no somos el único caso. Hay mucha gente que está denunciando el acoso y lo importante es estar alerta y que la gente se organice”, dijo.
Por su parte, Bryan Reyes enfatizó que a pesar de este contexto de hostigamiento que está viviendo, no existe institución a la cual puedan acudir.  Dijo que la única defensa que tienen es el apoyo y solidaridad de la gente.
“Hemos planteado desde hace tiempo nuestro desconocimiento al Estado y todas sus instituciones, así es que por lo mismo nos encontramos en una situación en donde nuestra única defensa, como la de todos, es el apoyo solidario de la banda y organización.
Así es que por lo mismo es que no hay un lugar a donde podamos recurrir. Es nuestra postura política. Es nuestra visión del panorama, en donde siempre que se acude a una institución del Estado, que supuestamente debería estar resguardando nuestra seguridad, hace lo contrario como la CDHDF y la CNDH.  En este caso nuestro llamado o preocupación va más en el sentido de que ellos nos están utilizando a nosotros como una brecha para empezar a ubicar puntos de reunión, gente que tiene más movimiento, gente que está trabajando y entonces darle seguimiento a lo que está pasando con las personas que nos han dado su apoyo”, dijo.
A lo anterior manifestó que este hostigamiento ha dificultado su vida diaria, puesto que es difícil poder realizar sus actividades a sabiendas de esta campaña de acoso.
“La situación es complicada. No podemos salir a trabajar, no podemos estar relacionándonos como lo hacíamos anteriormente. Ahora tenemos que vivir de un lugar a otro. Cada vez que salimos notamos la presencia de individuos siguiéndonos, fotografiándonos, y cada vez que estamos ahí, y nos reunimos con alguien es como un contagio de: ‘ya te pase el virus de la persecución’. Lo único que nos queda es mantener la clandestinidad”, manifestó.
Wendy Reyes, también demandó una serie de actos de acoso y hostigamiento en su contra. Entre otras cosas dijo que ha percibido a gente que la sigue, aunque, especificó, aún sin pasar a una agresión. Cabe recordar que Wendy fue una de las personas que lucho activamente por la libertad de Jacqueline y Bryan.
De igual forma manifestó que esta ola de acoso se ha presentado desde que ambos luchadores sociales fueron detenidos el noviembre de 2014.
“A partir de la detención de Bryan y Jacqueline el 15 de noviembre de 2014, las familias hemos sido hostigadas y perseguidas. Mari (mamá de Jacqueline) ha estado en situaciones de riesgo En mi caso he tenido seguimiento. Afortunadamente no he tenido ningún momento de riesgo. No me ha pasado nada pero han estado presentes, tanto llamadas extrañas donde al contestar suena como si hubiera un radio descompuesto, devuelvo la llamada y el número no existe.
He sentido la presencia de gente que está observando, que me sigue. Digo, no es paranoia ver el mismo rostro en varios lugares”, detalló.
Wendy expresó su repudio ante esta clase de hechos y dijo sentirse preocupada por lo que pudiera pasarle a Jacqueline, Bryan, familiares o amigos.
“Sí hemos tenido acoso y también es un poco aleatorio con los movimientos que se están dando por la aparición de los 43. Los compañeros en Tixtla también han tenido acoso. Ha habido intentos de homicidio con algunos compañeros: disparos, intentos de atropellamiento, hostigamiento.
Estamos un poco cansados de esto y estamos un poco preocupados por lo que nos pueda pasar a nosotros, nuestras familias y allegados, al final gente que nos vamos topando, camaradas que nos tienden la mano, también están en riesgo puesto que los van identificando al estar con nosotros”, expuso.
Jacqueline Santana y Bryan Reyes explicaron que desde los primeros días de agosto se presentaron hechos como el espionaje telefónico, pues, afirman, fueron interferidas sus líneas. Además del seguimiento y vigilancia por parte de sujetos extraños.
En este sentido recordaron que el pasado 11 de agosto notó el primer operativo, a cargo de un grupo de hombres,  de hostigamiento, vigilancia y acosos, esto a las afueras de su domicilio.
“De nuevo tipos merodeando con equipos de comunicación, señas, gesticulaciones obvias de la vigilancia a nuestro domicilio y persona pues nos encontrábamos solos.  En esta ocasión había gente con maletas y maletines extraños, que nos dieron a pensar la existencia de portación de armas; los camaradas y amigos pudieron, en contingente y solidarios, sacarnos de este sitio con resguardo.  Los acosadores  siguieron nuestro paso hasta el último minuto que estuvimos en la unidad. Cabe mencionar que acababa de ocurrir el multihomicidio de la Narvarte en el DF”, señaló Jacqueline.
De igual forma habló sobre lo ocurrido en las instalaciones del metro Sevilla el pasado 15 de agosto, en el segundo momento que detectaron un operativo más intenso. En este, detallaron, diversos hombres a las afueras del metro y al interior, mantenían la vigilancia sobre ellos.
“Ese sábado no pusimos de acuerdo con un compañero para vernos (en el metro) y a la espera la presencia de sujetos extraños nos inquietó, resistimos y avanzamos hasta el punto de encuentro en el metro Sevilla. Al llegar, de nuevo un operativo obvio, gente comunicándose en la aparición de nuestra presencia, acoso, vigilancia, fuera y adentro del metro; gente armada tapando nuestra circulación dentro del transporte. Resistimos, decidimos pedir ayuda a la Policía Industrial y Bancaria para salir y tomar un taxi y poder dirigirnos a la nueva guarida. Al salir, dos hombres armados se disolvieron al ver nuestra presencia con la policía. En consecuencia, la gente que nos ha apoyado ahora es perseguida, acosada y espiada””, detalló.
Es preciso recordar que antes de abandonar la prisión, Bryan y Jacqueline iniciaron una lucha anti carcelaria, en donde demandan, entre otras cosas, los malos tratas de los centros penitenciarios contra los internos. Ambos luchadores recuperaron su libertad el pasado 10 de julio, esto luego de que se cayeran las pruebas -consideradas por la defensa como ridículas- que supuestamente demostraban la comisión del delito de robo.
¡Comenta, debate y comparte!, ¡Romper el cerco informativo, crear conciencia y promover el cambio verdadero, está en tus manos.

¡No te pierdas y comparte mi canal youtube
Por cierto, ¿Ya hiciste tu contribución económica?, ¡Espero tu apoyo para www.tiraderodelbote.com http://ow.ly/qbLIv