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Cateos ilegales, amenazas, maltratos y hasta disparos a pobladores de comunidades rurales por parte de la Marina

Por:  / 30 septiembre, 2015
DERECHOSHUMANOS
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(30 de septiembre, 2015. Revolución TRESPUNTOCERO).- Meses atrás en el poblado El Dorado en Sinaloa, un menor de edad, que después fue calificado como ‘narcomenudista’ por la Marina, sin que pudieran comprobar nada, fue asesinado por los elementos, que le dispararon por la espalda.
Miguel Ángel de 17 años, iba en su motocicleta, cuando se encontró con marinos que patrullaban en dos unidades oficiales por las calles de la comunidad. Según habitantes, las fuerzas de la Armada llevaban días recorriendo el territorio.
El testimonio de uno de los testigos aportado a este medio, da cuenta que la versión de la Marina fue que cuando le hicieron el alto al menor, el chico no se detuvo y siguió la marcha, por lo que los marinos lo persiguieron, disparándole en forma constate, lo que provocó que el motociclista perdiera el control y se impactara contra una barda.
Sin embargo afirma que la Marina no permitió que el chico se detuviera y los disparos no se detuvieron pese a que pudieron cerrarle la marcha ya que ellos tenían camionetas y él una motocicleta. El menor quiso ponerse a salvo, ya que no podía detenerse con la lluvia de balazos, sin embargo ya iba herido y eso lo debilitó, un grupo de marinos lo siguió hasta abatirlo, “si ya lo habían cercado no había razón por la cual seguirle disparando, pero el cometido era matarlo”, asegura el testigo.
Aunque la Marina informó que el joven tenía porciones de droga y un encendedor, el testigo y otros más indicaron que observaron cuando los marinos le “sembraron” la droga y una escopeta a Miguel Ángel.
Durango y Sinaloa son ya catalogadas por su población como las principales víctimas de la Marina, esto derivado a que sus elementos a cargo de los operativos contra el crimen organizado, han incrementado violaciones a Derechos Humanos, principalmente en zonas rurales.
El Presidente de la Comisión de Defensa de Derechos Humanos de Sinaloa, Leonel Aguirre Meza, afirma a Revolución TRESPUNTOCERO que comunidades como Tamazula, y las aledañas a ésta, han aportado testimonios constantes en contra de la Marina, asegurando que estos los atacan ya en forma cotidiana, lo que mantiene a los habitantes en preocupación y consternación permanente, “sin exagerar, dada la situación dramática, al padecer la actuación irracional de los elementos de la Marina”.
A raíz de los homicidios de dos jóvenes en Tamazula y la detención de cuatro menores de edad, hechos que dio a conocer Revolución TRESPUNTOCERO meses atrás, “se creyó que la actuación de la Marina sería distinta y que su comportamiento iba a cambiar después de sus acciones, las cuales dieron fatídicos resultados. Lo cual no fue así, siguieron incurriendo en prácticas anómalas, como los casos graves y constantes de allanamientos de domicilios, amenazas a los pobladores, maltratos físicos y psicológicos hacia otras personas.
Recientemente detuvieron durante toda una noche a un joven, sin que existiera una acusación contundente, pese a que hicimos pública la situación, se complicó la liberación, particularmente pensé que este tipo de agravios eran situaciones pasadas, y que ante la denuncia abierta sobre los homicidios perpetrados por la Marina y toda la tragedia vivida por los pueblos, a quienes dispararon sin concesiones desde helicópteros y patrullas, la estrategia de los elementos cambiaría, pero al parecer les gustó actuar de forma arbitrariamente cruel y ahora lo hacen de forma común”, comenta Aguirre Meza.
Por ello el Presidente del Comité asegura que Tamazula es uno los principales ejemplos de una comunidad completamente sitiada por marinos, hay retenes en las entradas y salidas de ésta y otras poblaciones aledañas y durante todo el recorrido del territorio, es por ello que los acosos son constantes, pero aún con ellos la gente se ha quedado callada por miedo a represalias, aunque no por eso se han dejado de realizar manifestaciones con gran número de participantes, afirmando que los agentes no actúan con apego a la legalidad y que desde su llegada, nunca lo han hecho.
Las violaciones a Derechos Humanos que se han dado de forma sistemática, han llevado a pedir y después a exigir la presencia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en forma permanente, para que ésta actúe rápidamente cuando se presenten agravios a la población, “ya que éstos son constantes y cotidianos. No es posible que pongan que combaten el crimen, cuando ellos atacan por medio de prácticas delictuosas”.
Navolato es otro poblado aledaño a Tamazula, al cual es difícil de acceder porque el río lo atraviesa, y por ello no tiene suficiente comunicación con otras poblaciones, en aquella comunidad los allanamientos de domicilio se han convertido en constantes hostigamientos, donde detienen a personas dentro de su casa y los inculpan de delitos no cometidos, sin presentación de ningún tipo de orden, ni prueba de sus acusaciones.
En otras poblaciones rurales de Culiacán, en distintas ocasiones hay disparos y derivado de éstos heridos por la Marina, “los elementos bajo el pretexto de salir a prácticas, en realidad se introducen en las casas a catearlas, sin ningún documento que los avale. Existen quejas sobre este tipo de acciones, pero son pocas debido al miedo a dar datos e información que los pueda comprometer y provocarles mayores años, porque la PGR nunca nos ha hecho caso, ni recibido quejas sobre marinos o elementos del ejército”, asegura Aguirre Meza.
Desde hace poco más de cinco meses la Marina dio inicio a una serie de operativos aleatorios en Tamazula, a los que perteneció el ataque perpetrado por los elementos en contra de conductores y menores, donde murieron los dos jóvenes y se inculpó a los cuatro menores de portar armas y drogas (hecho que jamás se demostró y por ello obtuvieron su libertad), sin embargo en el último mes se han realizado constantemente e incluso han construido un cuartel para establecerse y por ello la gente ha tenido mayor miedo, debido a la presión que hay sobre ellos a diario.
Lo cierto es que la Marina es un cuerpo muy cerrado muy hermético en cuanto a la información nadie dio la cara nadie se responsabilizó del hecho muchísimo menos reconocieron el error que existió  es por eso que nosotros pedimos que cuando allá.  En el caso de los menores detenidos cuando pudiera salir en libertad pese a que se insistió a la familia que denunciaran Y exigieran disculpas públicas prefirieron mantenerse al margen por el miedo a las represalias ya que en este país no se puede denunciar a ningún tipo de autoridad sin que no te castigue por ello.
“Las familias de los menores prefirieron olvidarse de la situación, pese a que sugerimos se denunciara y pidiera una disculpa pública, lo cual no pasó, porque la abstención fue movida por el miedo, ellos han preferido no volver hablar del tema.
La realidad es que fuimos engañados, a nosotros se nos planteó en un primer momento un operativo de lucha contra el crimen organizado, precisamente por el número elevado de asesinatos, levantones y secuestros, pero la realidad fue distinta con la entrada de la Marina de 2 mil homicidios pasaron a ser 4 mil en forma anual, también aumentó el número de desaparecidos diarios, hoy tenemos más de 350, sin dejar de sumarle los altos índices de secuestros y robos”, asegura Leonel Aguirre.
Quien también comenta que es así como las estadísticas demuestran que la Marina no es efectiva y que solamente está devastando a la población, el activista asegura que “se plantearon operativos coordinados e inteligentes y sin violaciones a Derechos Humanos, sin embargo todo ha sido en forma contraria y ahora ellos son los que atacan”.
También comenta que es Enrique Peña Nieto, quien ha dado su respaldo para que la Marina actúe con total impunidad, “lo cual es un caso gravísimo ya que es la última instancia que tenemos los mexicanos, se supondría que es la dependencia que tiene un mejor nivel que el ejército, mayor preparación y sus operativos deberían ser con mayor apego a la ley, en lugar de darnos confianza nos da temor, realizan operativos ilegales, detienen personas inocentes y después los presentan como delincuentes”.
Leonel Aguirre Meza hace énfasis en el uso de la palabra ‘abatir’, y señala que es un insulto que la autoridad afirme que ‘abate criminales’ y bajo esa pronunciación se puede justificar un enfrentamiento.
“La misma prensa ha retomado el vocablo, al decir ‘abatió’ se está asegurando que la autoridad tiene la razón cuando lo eliminó, sin investigación o juicio previo y eso es lo más grave que podemos tolerar. Hay que recordar que Sinaloa y Durango tienen una penetración grave del crimen organizado, la sociedad está arrinconada, pero por otro lado también tiene impotencia al saber que la autoridad que te debe brindar protección, te ataca”, puntualiza el activista.
Para la Comisión de Defensa de Derechos Humanos de Sinaloa, el tema de narcotráfico y los negocios ilícitos que giran en torno a éste, no se han reducido, y pese a que se han detenido algunos delincuentes, la población ha padecido peores vejaciones, tratos crueles y tortura mayores con la Marina, que con el narcotráfico.
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