#Represión de #MorenoValle es un acto de #terror con el cual pretenden apagar la lucha: #estudiante #BUAP

Por: Edgar Rosas / 25 febrero, 2015 REVOLUCIÓN3.0

(25 de febrero, 2015. Revolución TRESPUNTOCERO).- Ante la represión estudiantil emprendida contra alumnos de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), el pasado 8 de febrero, un grupo de jóvenes pertenecientes a esta casa de estudios visitaron el martes las instalaciones del Senado de la República, donde expusieron la situación de hostigamiento que enfrentan y pidieron la intervención de la Comisión de Derechos Humanos de la cámara alta para detener los ataques cometidos en la entidad gobernada por Rafael Moreno Valle.

La delegación de alumnos presente en el senado, estuvo integrada por 4 estudiantes de la BUAP, quienes charlaron con Revolución TRESPUNTOCERO acerca de la situación sobre los hechos de represión cometidos en el zócalo de Puebla.

Victoria Tello Ortega, alumna de la BUAP, estuvo presente el día que un grupo de individuos atacaron al plantón de estudiantes que estaba en el zócalo de Puebla. Narra que alrededor de las 3:20 de la mañana, este grupo de personas no identificadas y con aliento alcohólico, se acercó y comenzó a agredir a los que mantenían la protesta.

“Uno de los tipos que venía con este grupo que nos atacó, se acercó al lugar donde me encontraba, traía su miembro afuera y nos dijo ‘este es un regalito por parte de Esparza (rector del a BUAP) y del gobierno, para que aprendan a respetar a la autoridad’. Traían consigo palos, varillas y bates… las sillas que teníamos las utilizaron para golpearnos”, comentó.

La estudiante relató que este grupo arremetió, inicialmente, contra los huelguistas instalados en la primera parte del plantón. Agregó que al hacer aparición, esta treintena de hombres comenzó a sacarlos de las casas de campaña donde dormían. “Los hombres golpearon directamente a las casas de campaña y por eso varios compañeros resultaron gravemente heridos, entre ellos una compañera a la cual le tuvieron que dar como 8 puntos de sutura por el golpe que recibió”, explicó.

Tello Ortega explicó que una vez iniciado el ataque, los hombres que irrumpieron trataron de replegarlos a la parte trasera, donde se ubica el monumento conocido como el “árbol de la vida”. En este sitio, manifiesta, las agresiones continuaron y de manera personal fue agredida con una varilla en el estómago.

“En la parte de atrás del zócalo estaba una camioneta y enfrente de ella una patrulla, nos acercamos para pedirles que nos ayudaran y se negaron, nos dijeron que no podían hacer nada para ayudarnos y dijo ‘aquí nadie te va ayudar’. Esta patrulla a la que le pedimos auxilio fue la que escoltó a esta camioneta en donde se llevaron a nuestros compañeros “, contó.

De igual forma, detalló que de la camioneta estacionada detrás de la patrulla, salieron un grupo de encapuchados, mismos que empezaron a detener y subir al vehículo a los alumnos del plantón. Manifestó que en este momento iniciaron las amenazas y comenzaron a decir cosas como: “que los iban a torturar y a quemar igual que a los 43 normalistas de Ayotzinapa”.

Explicó que el grupo de estudiantes con el que se desplazaba intentó pedir auxilio, sin tener resultados positivos pues nadie los ayudó.

“Nuestra demanda para exigir espacios en la BUAP seguirá a pesar de la represión”

Iván Elías Ojeda, de la comisión jurídica estudiantil de la BUAP, manifestó que estas estrategias de represión impulsadas por parte de las autoridades se pueden considerar como un acto de terror con el cual pretenden apagar la movilización.

Manifestó que el sector estudiantil de Puebla ha sido golpeado por diversos factores, uno de ellos obedece al temor de los gobernantes sobre el posible surgimiento de un movimiento como el 132 que interfiera de manera importante en las próximas elecciones.

“El sector estudiantil de Puebla es el único que ha seguido en movilización desde lo de Ayotzinapa. Antes de este año no había sufrido una represión como tal… había sufrido señalamientos, amenazas desde la cuestión de estipular las pintas como un delito grave y la clásica de tacharnos como grupos desestabilizadores”.

Añadió que esta postura de hostigamiento y ataque va encaminada al “control férreo” que pretende tener Moreno Valle y señaló que se ha iniciado una campaña para establecer un clima de terror profundo en la población, el cual genere desmovilización “y un control social más intenso”.

Elías Ojeda comentó a este medio, que desde el 10 de febrero se interpuso una demanda penal por lesiones, tortura y desaparición temporal cometida en contra de los estudiantes instalados en el plantón del zócalo de Puebla. Asimismo, dijo que se presentó una denuncia por el actuar de los policías, quienes participaron en los hechos por omisión, al no hacer nada y escoltar a la camioneta en donde se llevaron a los estudiantes.

“A la Comisión Estatal de Derechos Humanos se le dio aviso del ataque en el zócalo alrededor de las 4 am, sin embargo no se presentaron, sino hasta mucho después ya cuando no era urgente su intervención. La semana pasada se presentó la demanda ya ante la CNDH, porque también existen algunas omisiones por parte del a comisión estatal”, señaló.

Por otro lado, calificó como importante la contribución de Layda Sansores en la difusión del tema, gracias a su papel como integrante de la Comisión de Derechos Humanos del Senado y manifestó que esperan que la visita sirva para visibilizar los hechos que ocurren en Puebla.

No obstante manifestó que de acuerdo a la manera en cómo están conformadas las cámaras, en donde se favorece a los partido del régimen, puede haber un plan para que no trascienda la demanda contra la represión.

“Sí creemos que hay una complicidad de más, ya que consideramos que hay un tipo de apoyo en el proyecto presidencial que tiene el gobernador Moreno Valle, entonces eso condiciona las fuerzas representadas en las cámaras. Aunque haya el apoyo de senadores, vemos difícil que puedan trascender nuestros pronunciamientos”, comentó.

“Las autoridades no se han acercado con nosotros”

De acuerdo Shuryff Guerrero Contreras, estudiante de la BUAP, hasta el momento no ha existido ningún tipo de acercamiento con las autoridades, salvo el momento en que exigieron la atención médica de los estudiantes agredidos el día 8 de febrero.

“El día 8 de febrero cuando aparecen los compañeros que fueron llevados por los hombres que atacaron el plantón, se toma la decisión de ir a exigir al hospital universitario la atención de nuestros compañeros. Por medio de la presión se obliga a que el hospital los atienda, aunque de mala gana; les da una mala atención, los revisaron y los sacaron.

En ese momento hacen aparición abogado de la BUAP diciendo que nos van a poyar, pero lo único que hacen es darle una hojeada a los compañeros y sacarlos”, explicó.

Agregó que el apoyo por parte de la comunidad estudiantil se ha sentido de manera importante, auxiliando al movimiento encabezado por alumnos de la BUAP a difundir los acontecimientos entorno a la lucha.

Guerrero Contreras habló sobre los hechos ocurridos el 19 de enero, cuando se realizó una manifestación en el marco de la visita de Enrique Peña Nieto para inaugurar el hospital Niño poblano. “Ese día un compañero y yo fuimos levantados sin justificación alguna. La movilización pedía la aparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, pero fuimos detenidos arbitrariamente, desaparecidos hasta alrededor de las 6 pm. Los que nos tenían mentían sobre nuestro paradero, decían que no estábamos, cuando sí estábamos”, detalló.

En este sentido, demandó que el rector de la BUAP, Alfonso Esparza, se deslindó de los actos y calificó como porros a los detenidos. “El rector Esparza, antes de levantarnos se deslinda de nosotros diciendo que no nos va a poyar, y nos clasifica de porros. En cambio la Universidad Iberoamericana de Puebla lanzó un comunicado criminalizando la represión en contra de nosotros”, apuntó.

…

Por último, Iván Elías Ojeda, llamó a la sociedad a tomar conciencia de los actos represivos utilizados por las autoridades, ya que argumentó, de no hacer nada estas situaciones cada vez se instalaran más.

“Lo que sucedió en Ayotzinapa tal vez es el representación más grande, pero ya hay un ejercicio cotidiano de autoritarismo por parte del gobierno. En cualquier momento o lugar puede existir la represión, por cualquier motivo; lo que nos pasó a nosotros es que pedíamos aulas, no pedíamos nada más grave, era algo muy sencillo: espacios vacíos que podrían ser ocupados para dar cursos. Y eso nos habla de un talante represivo, que establece no tolerar absolutamente nada y controlar a la población por vía de la violencia y la manipulación mediática”, finalizó.

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